BUENAS Y MALAS NOTICIAS / Vallejo, Andrés

La exclusión del Banco Central de las actividades culturales es, en cambio, una mala noticia. Los antecedentes del Banco Central en este campo son excelentes. Conoce a fondo cómo hacerlo. Y, aspecto indispensable, tiene los recursos para hacerlo. Como en el caso del medioambiente, en el que mucho se pontifica y poco se hace por la escasez de recursos, en el campo de la cultura, las necesidades son inconmensurables. Muchos países afincan su gestión cultural en sus institutos emisores. El Banco de la República de Colombia es un ejemplo, con su excelente Museo del Oro. Difícilmente podrá el Ministerio de Cultura sustituir esas funciones, por buenas intenciones que, sin duda, existen. Hay cientos de miles de piezas arqueológicas, pinturas, tesoros que deben ser conservados. Y las posibilidades de nuevas adquisiciones serán limitadas, si no desaparecen, con lo que muchas obras patrimoniales saldrán del país. Y aunque mantuviera al calificado personal que tiene, no será en las mismas condiciones ni con la misma mística con que han trabajado. Se produce en estos procesos desmotivación en las personas y sus efectos se reflejarán en la labor cultural del país. Hoy, 25 ago. 2009, p. 4