AMNESIA / Falconí, Juan

Se cebaron en la economía y moral del "paisito" donde compraron desde algún hermano de un presidente de la República hasta conserjes de los órganos de control, pasando, obviamente, por una fiscal nada santa y el juez de los dólares y Pico -todavía impunes- entre otros jueces y toda clase de funcionarios incluyendo, por supuesto,descalificados diputados. Sus "agentes" en el Congreso, Cerdo Peinado u obediente gendarme, eran los mismos que atendían a los narcotraficantes.Con la plata de los depositantes emprendieron un largo viaje de ego y arrogancia que hoy está llegando a su fin gracias a la entereza de un presidente de la República que no pudieron comprar, chantajear, ni intimidar y esto, después de una década de sevicia altaneramente expresada en "sus medios", amparados en una dizque libertad de prensa que cualquiera invoca sin entender su extensión. Mas, la democracia y esa libertad de prensa no son para calumniar y robar sin sanción. Si los administradores y accionistas de un banco tienen que responder con sus bienes, como manda el Art. 29 de la Ley de la AGD, lo que es independiente de las deudas, no se puede excluir a empresas propietarias de medios, sólo por ser tales. El presidente no solo que no ha sido engañado sino que habrá detectado a quienes, desde la función pública, trabajan para las mafias; él no sufre la amnesia que causa un montón de dinero mal habido, con la que siempre han contado, al punto de así bautizar a un lujoso velero insolentemente exhibido como evidencia de impunidad. Hoy, 11 jul. 2008, p. A. 4