AUTONOMIA DEL BCE QUEDA EN EL OLVIDO

El Banco Central del Ecuador perdió su autonomía durante el actual Gobierno, con la vigencia de la Constitución elaborada en Montecristi y aprobada en el referéndum del 28 de septiembre de 2008. El artículo 303 de la Carta Política establece que la formulación de las políticas monetaria, crediticia, cambiaria y financiera es de facultad exclusiva de la Función Ejecutiva y se instrumentará a través del Banco Central del Ecuador (BCE). En cambio, la Constitución anterior lo definía como un ente "con autonomía técnica y administrativa". Con el nuevo esquema fue necesario adecuar el mecanismo operativo de toda la institución. La gerencia bancaria, por ejemplo, pasó a ser una gerencia financiera y abarca toda la estructura económica del país. El actual presidente del Directorio de la institución, Diego Borja, quien, a la vez es ministro Coordinador de la Política Económica dice que "el proceso de cambio se continuará ejecutando de manera oportuna". El funcionario añade que los cambios responden al nuevo direccionamiento que tiene la economía en el país. En todo caso, actualmente la injerencia del presidente de la República en el BCE es directa. La situación de dependencia de la entidad es cuestionada por el analista económico, Pablo Dávalos, de tendencia de izquierda. "Una relación tan estrecha con el presidente genera cuestionamientos sobre la credibilidad de las cifras que se emiten", dice. Dinero, Diario de Negocios, 15 ene. 2010, p. 6